Los Sánchez Barrios, bajo gobiernos neoliberales, se apropiaron de viviendas de manera ilícita, ocupando bajo amenaza a los vendedores ambulantes para entrar a los predios, despojarlos e invadirlos.
La candidata de “Va por México” al distrito 9, Diana Sánchez Barrios, fue detenida en la colonia Tabacalera de la alcaldía Cuauhtémoc, por su presunta participación en los delitos de extorsión agravada y robo agravado en pandilla, según indica una tarjeta informativa que publicó la Fiscalía General de Justicia de la Ciudad de México (FGJ-CDMX).
Diana Barrios realizó una transmisión vía Facebook al momento de su detención y, ahí, frente a la cámara, se dijo «inocente»; no obstante, su vida pública ha estado marcada por la corrupción y el abuso del poder.
Se debe mencionar que la candidata de la coalición PRI-PAN-PRD está vinculada a cinco carpetas de investigación en las que se le acusa de exigir a comerciantes informales y negocios establecidos, el pago de una cuota o “cobro de piso”; asimismo, se le inculpa de invasión de bienes inmuebles (en los que se reportan departamentos y edificios completos), del uso de armas de fuego y de agredir físicamente a clientes.
Además, hace algunos años, comerciantes de la capital habían denunciado sufrir abusos, amenazas y extorsiones por parte de Diana Sánchez Barrios y su asamblea. Testimonios de diversos vendedores exponen que la ex lideresa más importante del comercio informal del Centro Histórico de la Ciudad de México se aprovechó de su posición para amedrentar a los dueños y clientes de diferentes negocios.
Durante el anterior mandato priísta, la familia Sánchez Barrios se apoderó de una docena de inmuebles intestados; hubo juicios simulados y gran cantidad de compras ficticias que se realizaron con el apoyo de funcionarios del Registro Público, juzgados y notarios públicos.
Los Sánchez Barrios, bajo gobiernos neoliberales, se apropiaron de viviendas de manera ilícita, ocupando bajo amenaza a los vendedores ambulantes para entrar a los predios, despojarlos e invadirlos.
Después del arresto de la prianista, la Unidad de Inteligencia Financiera (UIF) le congeló sus cuentas bancarias para ser investigadas por operaciones irregulares.