AstraZeneca y Pfizer dejaron en ridículo a los gobernadores de la Alianza Federalista, al negarles la compra de vacunas contra el coronavirus.
Los gobernadores de la Alianza Federalista no han dejado de criticar al gobierno de la 4T por el plan de vacunación contra COVID-19 que implementó la Secretaría de Salud, que indica que los trabajadores de salud serían los primeros inmunizados, seguido por las personas de la tercera edad.
Inmediatamente los gobernadores de dicha alianza salieron a acusar al mandatario mexicano de negarles que pudieran comprar las dosis para aplicarlas a sus ciudadanos o comercializarlas.
No obstante, el presidente AMLO salió a señalar que la compra de las dosis en cualquier compañía no podía agilizarse debido a que México no era el único país al que tenían que abastecer, de ahí a que se realizara la calendarización para su aplicación en el país.
Pero los gobernadores y la Iniciativa Privada insistían en que el gobierno de la 4T les estaba negando el permiso para comercializar la vacuna.
A inicios de enero, después de varias quejas de los miembros de la alianza, AMLO accedió a que pudieran comprar la vacuna, pero obviamente tenía razón y las compañías AstraZeneca y Pfizer le darían la razón y dejarían en ridículo a los gobernadores.
Como en todo el mundo, la prioridad de los laboratorios es abastecer de las dosis a los gobiernos federales, no a estatales y municipales o al sector privado, que aunque sí se ha hecho, son las federaciones las que elaboran los planes de vacunación.
No habrá vacunas hasta 2022
Como si fuera un escarmiento, los laboratorios de AstraZeneca y Pfizer negaron la compra de vacunas a los gobernadores mexicanos ante la falta de disponibilidad.
Fue a través de las redes sociales de los mandatarios panistas que integran la alianza que tuvieron que reconocer que estaban en un error.
“Representantes comerciales de AstraZeneca y de Pfizer nos informan que no se tiene disponibilidad en la producción. El posible suministro sería a partir de diciembre o del próximo año”, escribieron los panistas.
El argumento de las empresas farmacéuticas es que no tienen disponibilidad en la producción de vacunas este año porque ya la tienen comprometida.
Es de recordar que Pfizer anunció que habría un retraso en el reparto de cargamento de vacunas en algunos países, entre estos México, para poder abastecer a los países más pobres.
Actualmente México tiene un acuerdo de adquirir 34.4 millones de vacunas de Pfizer, pero por humanitario aceptó que se retrasen las entregas para que los que menos tienen tengan acceso a ella.
