Durante un foro regional sobre la reforma eléctrica, Mario Vielma apuntó que si no se aprueba la reforma eléctrica de la 4T, la CFE podría desaparecer en 2029.
De acuerdo a estimaciones realizadas por la Comisión Federal de Electricidad (CFE), de no aprobarse la reforma eléctrica que propone la actual administración, para el año 2029 la empresa generadora de energía podría desaparecer al ser rebasada por compañías privadas.
Lo anterior, implicaría un aumento desmedido en el cobro de los recibos que cada mes o dos meses llegan a los hogares mexicanos, así lo afirmó Mario Vielma, director de Intermediación de Contratos Legados en CFE, durante una asamblea informativa sobre la reforma eléctrica en Coatzacoalcos, Veracruz.
De acuerdo al funcionario, las estadísticas arrojan que desde el año 2013 —a causa de la mal llamada reforma energética de Enrique Peña Nieto— la industria eléctrica fue distorsionada por compañías privadas.
Además, señaló, se ha convertido en una simulación para un modelo de compra-venta de electricidad que compite con el Mercado Eléctrico Mayorista (MEM) creado tras los cambios constitucionales.
Vielma recriminó que hoy en día la CFE produce solo el 39% de electricidad mientras que los privados el 61%; de seguir así, para 2029 la empresa productiva del Estado solo produciría el 16%, lo cual no sería sustentable para seguir en el mercado.
El funcionario aseveró que con la reforma de Peña Nieto se fortalecen acciones inconstitucionales que benefician únicamente al sector privado.
“Lo más preocupante para la CFE es que la tarifa de transmisión (porteo) para plantas de energía renovable y cogeneración de autoabasto es muy barata; tan solo entre 2019 y 2020 la empresa registró pérdidas por no cobrar este concepto por siete mil 800 y siete mil millones de pesos (respectivamente)”, apuntó.
