Sheinbaum aseveró que la CDMX es una urbe progresista, por lo que va en contra del odio y discriminación promovidos por grupos fascistas.
Luego de que el pasado fin de semana se llevó a cabo en la Ciudad de México la Conferencia Política de Acción Conservadora (CPAC), la cual reunió a grupos de extrema derecha y donde participó Eduardo Verástegui —personaje ultraconservador, conocido por impulsar organizaciones religiosas pro-vida— como representante de dicha alianza en México, la titular del Ejecutivo local, Claudia Sheinbaum Pardo, condenó la promoción del fascismo en la capital, donde advirtió que “no tiene cabida”.
En conferencia de prensa, aseveró que la Ciudad de México es una urbe progresista, de libertades y derechos para todas y todos y por ende, esta ideología política va en contra del odio y la discriminación.
Sheinbaum Pardo señaló que el fascismo es atroz porque discrimina y entre otras cosas, promueve el odio hacia las mujeres, además de que violenta la democracia.
“Argumentos que ni son religiosos ni son científicos, son de odio, porque la religión te lleva a amar al prójimo, y la ciencia te lleva a conocer la verdad de lo que ocurre en la naturaleza; ellos, ni aman al prójimo ni están con conocimiento científico. Lo que es, lo que representan es odio, odio, lo único que se defiende es a ellos mismos, a su mismo grupo étnico, a su mismo pensamiento, están en contra de la democracia, están en contra de las libertades”, aseveró.
La funcionaria agregó que los grupos fascistas defienden el odio, la discriminación y la atrocidad, “por supuesto que no estamos de acuerdo con ninguna de estas posiciones”, expuso.
Sheinbaum Pardo señaló que, a pesar de que en la ciudad hay libertad de expresión, se condena el odio, el racismo y la discriminación, por lo que es importante investigar con quién se vinculan estos grupos. Al respecto, comentó que dicha organización pudo haber sido invitada por el Partido Acción Nacional (PAN).
“Lo que hay que ver quien trajo a estos grupos, también porque quien se reunió con VOX, el partido de ultraderecha español, fue el PAN. El PAN lo trajo”, apuntó.
Cabe recordar que el año pasado, el PAN se asumió de manera oficial con ideología de ultraderecha radical al arropar al líder neofranquista del partido español Vox, Santiago Abascal, quien —como muchos panistas— forma parte de la organización secreta de extrema derecha: El Yunque.
Lo anterior, después de que senadores y diputados blanquiazules encabezados por Julen Rementería —entre los que se encuentran Lilly Téllez, Alejandra Reynoso y Roberto Moya— formalizaran la alianza con Vox, al respaldar la iniciativa conocida como Carta de Madrid impulsada por los ultraderechistas españoles, con lo que pretenden crear una cruzada contra la izquierda política.