El expresidente de Bolivia, Evo Morales agradeció a AMLO por haberle salvado la vida, tras el ‘golpe de estado’ que sufrió su gobierno en 2019.
Evo Morales declaró lo agradecido que está con el presidente Andrés Manuel López Obrador por haberle dado asilo político en México tras el golpe de estado que sufrió su gobierno en 2019.
“Me despedí telefónicamente del presidente de México, agradecí todo lo que hizo por mi, me salvó la vida, me cuidó, excelente atención, al siguiente día nos venimos a Argentina”, dijo Evo Morales en una entrevista difundida por la agencia EFE.
Fue en noviembre de 2019 cuando el gobierno de la 4T ofreció asilo político a Evo Morales, cuya vida e integridad estaba en riesgo por el golpe de estado en su contra. Fue un avión de las Fuerzas Armadas mexicanas quien viajó hasta Bolivia para trasladarlo a México.
«Hermanas y hermanos, parto rumbo a México, agradecido por el desprendimiento del Gobierno de ese pueblo hermano que nos brindó asilo para cuidar nuestra vida», publicó Evo Morales en su cuenta de Twitter en noviembre de 2019.
A pesar de las reacciones de la oposición, el canciller mexicano argumentó que México se ha caracterizado por su tradición en materia de protección a asilados a lo largo de su historia.
“Es un Estado incluyente y solidario cuyas puertas han estado abiertas para quienes han tenido la necesidad de abandonar sus países por persecución política y otras causas”, dijo.
Las sucias intenciones de EE.UU
El exmandatario boliviano también dio a conocer que cuando estuvo en México sostuvo una reunión con el canciller Marcelo Ebrard, quien le confesó las intenciones que Estados Unidos tenía para el MAS, su partido político.
“En una reunión nos dijo que Estados Unidos va a dividir a la bancada del MAS, Estados Unidos no quiere que Evo vuelva a Bolivia”, mencionó Morales tras añadir que esto mismo fue confirmado al exvicepresidente, Álvaro García Linera, durante otro encuentro.
De acuerdo a Evo, Marcelo Ebrard le dijo a él y a su equipo que Estados Unidos no lo quería de regreso en Bolivia, por lo que pretendía dividir la bancada de su partido Movimiento al Socialismo (MAS) en el Congreso.
Además, también señaló que Ebrard le confesó que el gobierno estadounidense no deseaba que fuera a Argentina, país al que se mudaría un mes después de estar en México.
Recordó que tanto en México como en Argentina le advirtieron que como asilado no podía expresar opiniones políticas sobre dichos países, aunque “por normas si podía hablar sobre Bolivia era mi derecho y aproveché los medios de comunicación”.
En torno a su viaje a Cuba, Morales confesó que no fue por motivos de salud, sino para para planear con el gobierno cubano y el venezolano “retomar la democracia” en Bolivia.
Evo Morales volvió a acusar a los Estados Unidos de estar detrás del golpe de Estado en Bolivia para quedarse con los yacimientos de litio y no porque hubiera un fraude en la elección presidencial, para prueba de ello el triunfo de Arce en las elecciones de octubre 2020.
“El gobierno ‘de facto’ de Jeanine Áñez dejó al país destrozado económicamente, además de los estragos que ha causado la pandemia de Covid-19”, dijo tras respaldar al actual gobierno encabezado por Lucio Arce. Así mismo descartó que en un futuro vaya a presentar una nueva candidatura presidencial.