La Secretaría del Medio Ambiente de la CDMX impide la realización de un evento musical nocturno en zona chinampera. ¿La razón? Defender uno de los ecosistemas más valiosos del país.
La Secretaría del Medio Ambiente (SEDEMA) de la Ciudad de México le puso un alto al evento “Sonic Jungle”, una fiesta nocturna que pretendía realizarse este sábado 5 de abril en plena zona chinampera, dentro del Área Natural Protegida (ANP) “Ejidos de Xochimilco y San Gregorio Atlapulco”.
La decisión, tomada en conjunto con organizadores y autoridades locales, se basó en que el evento contravenía la normatividad vigente para esta zona reconocida por la UNESCO como Patrimonio Mundial, Natural y Cultural de la Humanidad.
Las denuncias ciudadanas encendieron las alertas: música a todo volumen, luces intensas y cientos de personas reunidas en un ecosistema frágil. ¿Qué podría salir mal? Todo. Por eso, tras una reunión entre la titular de SEDEMA, Julia Álvarez Icaza, la alcaldesa de Xochimilco, Circe Camacho, y los propietarios del predio, se acordó suspender el evento.
La zona chinampera de Xochimilco no es cualquier terreno baldío: es un ecosistema estratégico protegido desde 2006, regulado por un Programa de Manejo desde 2018. En otras palabras, tiene reglas claras que prohíben actividades que puedan afectar su biodiversidad, servicios ambientales y patrimonio agroecológico.
Música sí, pero no así
Eventos masivos como este —con sonido, luces y multitudes— pueden afectar gravemente a especies locales, alterar ciclos biológicos, contaminar canales y humedales, compactar el suelo e incluso deteriorar las chinampas. Y no, ponerle «jungle» al nombre no lo hace más ecológico.
La suspensión del evento está plenamente respaldada por la ley. Entre las normas que se aplicaron destacan:
- Reglas 99 y 108 del Programa de Manejo del ANP, que prohíben eventos con sonidos, luces o vibraciones que alteren el ecosistema.
- Artículo 50 del Reglamento de la Ley Ambiental del DF, que impide actividades que dañen recursos naturales en Áreas Naturales Protegidas.
- Norma Ambiental NADF-005-AMB-2013, sobre límites máximos de emisiones sonoras en la ciudad.
- Ley Ambiental de la CDMX, que contempla sanciones y clausuras por incumplir programas de ordenamiento ecológico.
Fiestas sí, pero con conciencia
SEDEMA dejó claro que no está en contra de la cultura, la música ni el esparcimiento, pero todo debe hacerse en orden, con respeto al medio ambiente y dentro del marco legal. Se exhorta a organizadores, colectivos y ciudadanía a planear eventos compatibles con la conservación ecológica.
La dependencia continuará trabajando en coordinación con comunidades locales y productores chinamperos para conservar este ecosistema único. Además, reforzará la vigilancia para evitar que actividades similares pongan en riesgo el territorio porque proteger Xochimilco no es opcional: es una responsabilidad compartida.