El senador y excandidato presidencial Gustavo Petro ha expresado que la reforma va «en contra de los intereses de la gente trabajadora, no se le puede subir impuestos a la comida cuando crece el hambre y no se le puede subir impuestos a la gente que trabaja cuando crece el desempleo».
En Colombia se ha dado inicio a un Paro Nacional indefinido como reacción a una Reforma Tributaria neoliberal, la cual pretende cargarle la mano a la gente de a pie y las familias trabajadoras en busca de recaudar más de 26 billones de pesos, supuestamente para mitigar las necesidades financieras del país, tras la emergencia sanitaria por COVID-19.
A decir del ministro de Hacienda y Crédito Público, Alberto Carrasquilla, el Estado tiene presupuesto para funcionar solo seis o siete semanas más del presente año, lo cual deja en evidencia los derroches y desfalcos, producto de la corrupción y de las prioridades mal orientadas del actual gobierno.
Por ejemplo, en plena pandemia se destinaron 37 billones de pesos colombianos a la compra de aviones de combate de última tecnología, según denunció la senadora por la Unión Patriótica, Aida Avella.
Ahora, miles de estudiantes, indígenas, campesinos y trabajadores que han sufrido exclusión se han lanzado a las calles para movilizarse como en 2019 y/o han decidido cesar sus actividades este miércoles 28 de abril.
Cabe destacar que esta Reforma Tributaria busca aumentar los impuestos, particularmente, a los ingresos medios y a varios alimentos de la canasta básica. Es en este sentido que se ha despertado la indignación social mayoritaria de manera totalmente orgánica.
De igual forma, también se marcha contra las masacres, asesinatos sistemáticos de líderes sociales e indígenas y el «paquetazo de Duque» que incluye las reformas laboral y pensional, la privatización del aparato productivo del Estado y del sector financiero estatal, entre otras medidas que atentan contra el bienestar de las y los colombianos.
El presidente de la Central Unitaria de Trabajadores (CUT), Francisco Maltés Tello, afirmó que la responsabilidad del paro del 28 de abril “es del gobierno de Duque, que se niega a acoger un clamor nacional para retirar el proyecto del Congreso de la República”.
Por su parte, el senador y excandidato presidencial Gustavo Petro ha expresado que la reforma va «en contra de los intereses de la gente trabajadora, no se le puede subir impuestos a la comida cuando crece el hambre y no se le puede subir impuestos a la gente que trabaja cuando crece el desempleo. Tiene todo el derecho democrático la población que quiere expresarse en contra de la reforma».
Sin embargo, en el marco de estas protestas, el gobierno ha respondido con represiones violentas que ya han costado la vida de tres manifestantes en Cali, Bogotá y Neiva, respectivamente.