El matrimonio infantil será sancionado con penas de ocho a 15 años de prisión e incrementará a 22 años si la víctima es integrante de una comunidad indígena o afromexicana
El Senado mexicano aprobó un proyecto para penalizar el matrimonio infantil. De acuerdo con el dictamen, esta práctica será sancionada con penas de ocho a 15 años de prisión, e incrementará a 22 años de cárcel si la víctima es integrante de una comunidad indígena o afromexicana.
El decreto reforma el artículo 205-Bis del Código Penal Federal y fue aprobado por unanimidad de 90 votos de todas las bancadas. Dicho proyecto establece que es cohabitación forzada la que se comete en contra de personas menores de 18 años, de personas que no tienen capacidad para comprender el significado del hecho o de las que no tienen capacidad para resistirlo.
Comete el delito de cohabitación forzada “quien obligue, coaccione, induzca, solicite, gestione u oferte a una o varias de estas personas a unirse informal o consuetudinariamente, con o sin su consentimiento, con alguien de su misma condición o con persona mayor de dieciocho años de edad, con el fin de convivir en forma constante y equiparable a la de un matrimonio”.
Tras su aprobación, el proyecto fue enviado al Ejecutivo federal para su promulgación y entrada en vigor.
Según datos del Fondo de las Naciones Unidas para la Infancia (UNICEF), en América Latina «una de cada cuatro mujeres de 20 a 24 años contrajo matrimonio por primera vez o mantenía una unión temprana antes de cumplir los 18 años«.
Por otro lado, el informe Estado Mundial de la Población 2020 elaborado por la ONU, en México, el matrimonio infantil y las uniones tempranas afectan al 4.45% de las adolescentes entre los 12 y 17 años anualmente, en los estados de Chiapas, Guerrero, Michoacán y Tabasco esta práctica es frecuente.
